Soy profesor de música 

 

“El cuarteto” fabula musical.

Por admin
Fábulas llamadas leyendas que riman,lo que sin duda conlleva la moral. No solo los países eslavos, sino también el resto del mundo, están familiarizados con las historias rimadas de Ivan Andreevich Krylov, un fabulista ruso cuya principal actividad de escritura se encuentra en la primera mitad del siglo XVIII. Su carrera no comenzó con las fábulas. Primero, Ivan Krylov escribió obras satíricas e historias, pero no fueron coronadas con tal éxito, que el autor logró mediante la publicación de fábulas. El escritor combinó milagrosamente la vida política y un gran sentido del humor, ya que no solo era un escritor, sino también un consejero de estado. Las personas que vivían en ese momento lo recordaban como un amante de los lugares públicos y las conversaciones con campesinos que a Krylov le encantaba …
Iván Andréyevich Krylov fue hijo de un militar, que falleció cuando él tenía 10 años. Con su madre se trasladó a San Petersburgo, para pedir una pensión del gobierno. Krylov consiguió un trabajo en la Corte, pero lo dejó pronto para dedicarse íntegramente a su carrera literaria. Una comedia que había escrito a los 14 años fue su primera publicación, que también ganó un premio que invirtió en obras de autores franceses, tan de moda en aquellos tiempos. Así, en un principio, se dio a conocer como escritor satírico y social con obras como El correo de los espíritusEl espectador y El mercurio de San Petersburgo.
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Al empezar el siglo XIX publicó una primera colección de 23 fábulas y obtuvo muchísimo éxito. Así que siguió publicando volúmenes (hasta 8) que le sirvieron para aumentar su popularidad y ser considerado hasta ahora el fabulista por excelencia de la literatura rusa. Por supuesto, las fuentes para sus fábulas beben de la inspiración de los clásicos como Esopo o La Fontaine, pero también con los rasgos del carácter ruso. Y comparten la intención didáctica y ejemplarizante propia del género, además de mostrar los vicios humanos y destacar en especial la incompetencia, la arrogancia y la estupidez en la sociedad de la época.
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Su estilo se caracteriza por el uso que hace de la libertad de la lengua, que implica más realismo y lo acerca más al pueblo, de ahí su éxito. Por ejemplo, hacía pensar y hablar a los animales como rusos reales y no como criaturas abstractas. Esa digamos cercanía lo pusieron en el punto de mira de los críticos más cultos, que lo señalaban y despreciaban ese uso libre del lenguaje. Pero también hubo autores un poco más posteriores como Alexander Pushkin, máximo exponente del romanticismo, que lo consideró como un «auténtico poeta popular ruso». Krylov murió en San Peterburgo en 1844.
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EL CUARTETO.
Ivan Krylov ( traducción de Victoria Fernandez)

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El mono travieso, el burro , el cabrío y el oso patoso

Decidieron tocar un cuarteto hermoso.

Buscaron partituras de bajo, viola y dos violines

Y se sentaron en el prado bajo la sombra de los tilos,

Para cautivar al mundo con su arte genuino.

 

Golpearon los arcos, desgarrando la música sin sentidos.

“¡Alto, hermanos, alto! grita Mono . – ¡Esperad!

¿Cómo hacemos la música? Si mal estamos sentados.

Tu Mishenka,con el bajo, ponte frente la viola,

yo, violín prima,con el segundo violín estaré

Entonces nuestra música será un total deleite.

¡Que Baile el bosque y las montañas!”

Asi comenzó el Cuarteto, siguiendo tocando terrible.

—El Burro grito-“¡Escuchad, encontré el secreto!

al llevarnos muy bien podemos sentarnos juntos

Obedeciendo al Burro: se sentaron decente en fila;

Y, sin embargo, el Cuarteto no salía.

discutieron, argumentaron, analizaron

Quién y cómo tenía que sentarse.

El Ruiseñor volaba sobre ellos con altura.

Y le pidieron ayuda, para resolver sus dudas.

“Le suplicamos” dicen, “tener una hora de paciencia,

Para que nuestro Cuarteto toque con excelencia:

Tenemos las notas, tenemos instrumentos,

¡Solo dinos cómo sentarnos con ellos! —

“Para ser un músico, necesitas habilidad

Y oídos con más suavidad, –

El Ruiseñor les responde, –

Y ustedes, amigos, da igual donde sentados estarán,

En músicos no se convertirán.