“El piano – es  la base del instrumentalismo” M.Rostropovich.

Parece que estas palabras expresan la idea de que toda erudición profesional, todo conocimiento teórico-musical y la comprensión del material musical en sí ,es imposible sin dominar el piano.

De hecho, si un violonchelista (violinista, flautista, etc.) solo conoce el material musical que interpreta y no puede reproducir la parte de piano (o un arreglo de la parte de orquesta) al menos en términos generales, entonces su conocimiento de la música, en el mejor de los casos, tendrá lugar sólo la mitad de la idea musical de la obra.

Sin mencionar lo desastroso que esto resulta ser durante la práctica

 de conjuntos con la participación del piano,donde como en ningún otro lugar, se aprecia su papel como “base musical del conjunto”.

Por supuesto, se puede escuchar la parte del piano durante los ensayos, pero ¿cuándo un músico conoce la música que toca más profundamente ,es cuando conoce la parte del piano por sí mismo.

 No menos importante es la noción  de este instrumento en los estudios de otras disciplinas musicales y teóricas como la armonía, la teoría musical, la polifonía, sin mencionar el análisis de las formas musicales.

 Si remontamos al siglo XIX, la tradición del concepto de “músico” absorbía mucho más que hoy. Un músico era un intérprete (por regla general, en varios instrumentos),  compositor, profesor, arreglista etc.

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